Cómo aliviar el dolor de rodilla

2022-12-07 17:43:54 By : Ms. jenny wu

El dolor de rodilla es un problema muy habitual en muchas personas, sin distinción de género, raza o edad. Evidentemente hay factores en los que puede empeorar o aumentar el riesgo de sufrir esta lesión. La rodilla, es una articulación grande y compleja. Lo componen principalmente tres partes óseas, la unión con el fémur, la unión con la tibia y la rótula que es el hueso que da la movilidad a esta articulación. Por lo que en el dolor de rodillas se verán implicados alguno de estos huesos. Y no solo la rótula o la parte que se dobla.

Entre medio hay dos discos cartilaginosos llamados meniscos. Los extremos de los huesos, están protegidos por el cartílago, evitando que los huesos se rocen e integrados en una cápsula synovium que ayuda evitar la fricción. Son concretamente unas bolsas con líquido que lubrica y evita la fricción. El líquido se denomina sinovial.

A los lados  y por detrás de la rodilla están los ligamentos. Los tendones conectan músculos y huesos. Los ligamentos juntamente con los músculos sujetan los huesos. El dolor en la rodilla lo podemos diferenciar por dos tipos principalmente, lesiones después de esfuerzos puntuales o ejercicios. Con dolor repentino. O por dolor progresivo por desgaste mayoritariamente debido a la edad y desgaste articular, empieza con una molestia leve y cada vez empeora.

Las rodillas son unas de las articulaciones que más sufren desgaste y el problema de la artrosis y artritis. El dolor de rodillas es muy in-habilitante, ya que una rodilla sana puede moverse y facilitar la movilidad, cuando hay dolor el caminar solo se convierte en un problema y hasta incapacitante.

-Los tipos de aguas termales y sus beneficios

La mayoría de veces, los dolores de la rodilla se deben a un problema de ligamentos, menisco o la rodilla del corredor, aunque hay muchos más problemas.

Artrosis: Una de las causas más frecuentes del dolor de rodilla provocado por el desgaste del cartílago hasta la desaparición del mismo. Al desgastarse el cartílago no cumple la función que debería por lo que se rozan los huesos en el movimiento, este roce provoca dolor e inflamación de las rodillas. Este rozamiento continuo provoca inflamación de los huesos, lo que  puede derivar en un aumento del tamaño del mismo y provocando hasta la deformación. El dolor se localiza principalmente delante y detrás de la rodilla. La edad, obesidad, lesiones antiguas, estilo de vida, la práctica de ejercicios muy intensos o incluso genética pueden afectar a más o menos al riesgo de padecer artrosis. El desarrollo de la misma es progresivo, y con el avance de la enfermedad el dolor es más intenso, desde el dolor al contacto o al simple movimiento de la misma.

Artritis u Osteoartritis: No se debe confundir con la artrosis, en la artritis la membrana sinovial se inflama, esta inflamación provoca la aparición de sustancias químicas que destruyen el cartílago. La inflamación aguda de la rodilla o artritis puede ser debido a diferentes enfermedades como artritis reumatoide, la gota o a procesos infecciosos. Esta inflamación provoca dolor.  En la artritis reumatoide puede afectar todo el organismo incluyendo las rodillas y está implicado el sistema autoinmune. Se trata de una enfermedad crónica, y el dolor de la misma es variable. Artritis infectada, cuando además de la inflamación, hay dolor y rojeces, cursa con fiebre.

Gota y Pseudo-gota: La gota aunque suele afectar al dedo gordo del pié también puede afectar a la rodilla, y es debido a los cristales de ácido úrico en la articulación. La Pseudo-gota, algunas veces, se puede confundir por cristales de calcio en las rodillas, aunque igualmente es doloroso.

Condromalacia: Es un dolor entre rótula y fémur, muy habitual en atletas y en mayores que tienen una ligera desalineación de la rótula , este desplazamiento puede provocar dolor  de más o menos intensidad al degenerar el cartílago situado allí. La rodilla suele provocar ruidos al subir o bajar escaleras o al flexionar las piernas. Puede deberse, por un golpe fuerte sobre la rodilla doblada, uso excesivo de las rodillas, la manera de andar, o debido a una rotura o dislocación.

-Consejos prácticos para el cuidado de pies

Cuando el dolor es claramente por bursitis lo ideal es la utilización de frio, acumuladores de frio tres o cuatro veces al día durante 15 minutos. Procurando proteger la piel directamente del frío y no dejándolo toda la noche. Es importante no apoyar sobre la zona inflamada, por lo que se aconseja poner una almohada entre las rodillas al acostarse para que el contacto sea suave y blando. Evitar el máximo de tiempo de pie.

Es muy importante fortalecer la musculatura de las piernas para evitar el posterior dolor de rodilla, por desgaste, ya que con la musculatura fuerte se consigue una mayor sujeción de la rodilla y menos presión sobre ella. El ejercicio siempre ha de ser gradual en intensidad y siempre calentar antes de entrenar.

Además de las acciones antes mencionadas, cuando las rodillas duelen: 

El paracetamol o el ibuprofeno es uno de los tratamientos de inicio recomendado por los médicos por su acción analgésica y antiinflamatoria. Los antiinflamatorios no esteroideos o AINE, son los más habituales y conocidos entre ellos los más comunes son el Diclofenaco, Aceclofenaco, Ketoprofeno, Diflunisal, la Indometacina o el Piroxicam, aunque no son muy recomendables en tratamientos largos y en enfermedades crónicas, por sus efectos secundarios.

Otros fármacos como el Celecoxib, tiene menos posibilidades de efectos secundarios y son más habituales en dolencias como la artritis. Analgésicos tópicos. Antiinflamatorios tópicos como el ibuprofeno tópico, el piroxicam tópico, la capsaicina y el ácido hialurónico en forma de gel.

El Mentol o el alcanfor, el salicilato de metilo, entre otros igualmente en geles son eficaces al hacer disminuir la temperatura de la zona. Corticosterioides inyectable, cuando la inflamación es localizada y cuando ya no se responde a analgésicos orales, aunque debe estar limitado a tres inyecciones anuales, lo más habitual es el Hexacetonido de triamincinolona.

Estos al aumentar la viscosidad del líquido que rodea la rodilla, disminuye el roce y con ello la sensación de dolor. Aunque son necesarias varias inyecciones para conseguir el efecto deseado. Existen muchas marcas que elaboran estos productos, con diferentes espesores, cantidades de hialurónico en cada vial.

Productos con efecto frío como la marca Biofreeze, los parches tipo Icy hot pack o Flexall son efectivos.

Dentro de los productos que podemos tomar para intentar reducir al mínimo este problema existen en el mercado unos suplementos nutricionales que ayudaran a mejorar esta dolencia como son:

Glucosamina y el sulfato de condroitina son sustancias que se encuentran naturalmente en nuestro organismo. La Glucosamina es un amino-sacarido, está muy implicado en la formación y en la reparación de los cartílagos. El condroitin sulfato es un proteoglicano que principalmente da elasticidad al cartílago. La combinación de ambos elementos alivian el dolor de la articulación y mejoran el funcionamiento de la misma. Las dosis adecuadas para que sean efectivas, son según los estudios clínicos, 1500 mg/día de glucosamina, 1200 mg/ día de condroitin sulfato, lo ideal es tomar ambos juntos. De hecho hay suplementos comercializados que lo contienen así.

El condroitin sulfato, algunas veces puede provocar, heces blandas o flatulencia. La glucosamina está contraindicada en diabéticos y alérgicos al marisco. Condroitin sulfato, en personas que están tomando medicación anticoagulante, esta sustancia puede potenciar la acción del fármaco. El ácido hialuronico es igualmente un polisacárido con las acciones parecidas a la glucosamina.

La acción antiinflamatoria de la cúrcuma y su acción analgésica, hace que sea efectiva y una opción alternativa a los antiinflamatorios no esteroides cuando se padece dolores puntuales de rodillas. La dosis adecuada 400 mg-600 mg/tres veces al día.

Los ácidos grasos omega 3 son a largo plazo uno de los productos más efectivos para evitar y disminuir la inflamación crónica. Reduce la fatiga, disminuir la rigidez de la mañana, entre otras funciones como la de mejorar la memoria la DHA. La dosis adecuada mínima es de 1 gramo/día.

Es importante diferenciar los tipos de colágeno de uso nutricional, el más adecuado para mejorar el problema articular es el tipo II. Las dosis recomendada es de 2,5 mg a 10 mg/día. Ayuda a disminuir la inflamación, edema y la rigidez de la articulación, es importante que las dosis sean las necesarias para que sea efectivo.

Este tipo de colágeno consiste en 18 amino-ácidos que forman parte del cartílago. No es conveniente mezclar este tipo de colágeno con los de los otros tipos I y III, si se desea hacerlo hay que separarlo un mínimo de una hora entre las dos tomas.

Este componente rico en condroitin sulfato, tendrá las mismas acciones tomar este. Aunque la cantidad de concreta de esta sustancia en el cartílago de tiburón no es tan exacta. Las dosis pueden oscilar de 0,5 a 4,5 gr/día. No se debe mezclar alimentos ácidos como los zumos de cítricos. Alivia el dolor, disminuya la inflamación por la artritis y en la psoriasis en la aplicación tópica. Es incompatible en los diabéticos.

Vas a responder a , si lo prefieres, Comenta en la noticia

Esta es la opinión de los internautas, no la de hola.com. No está permitido verter comentarios contrarios a las leyes españolas o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema

Para poder comentar necesita ser usuario registrado de hola.com